San Benito

NOVENA DE SAN BENITO


1. ORACIÓN PARA TODOS LOS DIAS

Señor, con fe y confianza en tu bondad y reconociéndome pecador, que necesita de tu perdón, quiero ofrecerte mis oraciones en esta novena en honor de San Benito.
Conociendo el modo en que el santo Abad vivió el Evangelio, que yo sepa imitarlo en aquellas virtudes necesarias para poder alcanzar, como él, la santidad. Y pido que me condedas la gracia que te pido en esta novena, y que espero alcanzar, de tu infinita misericordia, por su poderosa intercesión. Amén

2. HIMNO

Estribillo

San Benito
De tus devotos fiel protector,
Presenta nuestra oración
Ante el Señor.

Estrofas

1. Benito, de noble estirpe,
de saber y ciencia ansioso,
marcha a Roma presuroso;
pero Dios se fija en él
y le inspira la virtud,
cosa que debemos aprender.

2. En Subiaco ya comienza
su vida de soledad.
El enemigo envidioso
le incita por la maldad;
pero Benito, entre espinos,
vence al poder infernal.

3. En Subiaco es perseguido
y a Montecasino va,
abriendo nuevo camino.
Su oración y su trabajo,
las armas que va a tomar,
predicando la verdad.

4. Sus virtudes eminentes
con milagros son aprobadas;
El Señor obra en él,
y Mauro sobre las aguas.
Se rompe la letal copa,
y enfermos salud recobran.

5. De seguidores rodeado
su vida entrega al Señor,
y ellos ven con mucho gozo
volar su alma hacia Dios.
Benito, que  a tus devotos,
les alcancen el perdón.


3. ORACIÓN VOCAL

Sea el Rosario o cualquir otra oración; pidiendo por la Iglesia, el Papa y la salvación de toda la humanidad.

4. REFLEXIÓN PARA CADA DÍA

La que se indicar, o bien se puede leer un texto de las Sagradas escrituras, o un documento papal…

5. ORACIÓN DE LOS FIELES

1. Por el Papa y todos los pastores de la Iglesia, para que sigan predicando con fidelidad la Buena Noticia del Evangelio. OREMOS
2. Por las intenciones, que ponemos bajo la intercesión de San Benito en esta novena, para que el Señor las acoja benignamente. OREMOS
3. Por nuestros hermanos enfermos y a los que nos han pedido que recemos por ellos, para que la gloriosa intercesión de San Benito les consiga del Señor la salud del cuerpo y del alma. OREMOS
4. Para que los que somos devotos de San Benito, nos sintamos urgidos a realizar en nuestra vida el lema benedictino de “rezar y trabajar”. OREMOS
5. Para que sigamos honrando cada día más a nuestro Santo Patrón, San Benito, y su intercesión nos ayude a ser como él fieles seguidores de Cristo. OREMOS
6. Por el eterno descanso de todos los difuntos, y especialmente los de nuestras familias y aquellos que fueron en vida devotos de San Benito de Gondomar. OREMOS

6. ORACIÓN FINAL

Para la novena de marzo:

Oh Dios, que constituiste al abad San benito, lleno del espíritu de tu Hijo, maestro insigne de perfección evangélica, haz que quienes celebramos su glorioso tránsito a los cielos, nos esforcemos por alcanazar las cumbres de la caridad y de la gloria. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén

Para la novena de julio:

Señor, Dios nuestro, que hiciste del abad San Benito un esclarecido maestro en la escuela del divino servicio, concédenos, por su intercesión que, prefiriendo tu amor a todas las cosas, avancemos por la senda de los mandameintos con libertad de corazón. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.



REFLEXIONES PARA CADA DÍA

Día primero

San Benito nace en Nursia, pequeña población montañosa de Italia. El Impero Romano está en decadencia. En Roma, la capital, la corrupción es casi total. Benito, educado en las virtudes cristianas, mantiene sólida su fe.

Debemos darnos cuenta de la tremenda responsabilidad que tenemos todos, especialmente los padres, de educar –orientar- y animar en la vivencia de la virtudes cristianas a los más pequeños.

Pidamos que nos ayude la intercesión de San Benito en el cumplimiento de esta difícil pero gratificante tarea.


Día segundo

Benito va a Roma a ampliar sus conocimientos, pero allí encuentra rutina, frivolidad, vacío en su compañeros. Siente que ese no es su sitio y, después de suplicar a Dios, decide buscar en la soledad de Subiaco la voluntad de Dios.

Debemos siempre buscar la voluntad de Dios, nuestra vocación, y saber decir no a aquello que nos pueda alejar de la vida de verdaderos hijos de Dios.

Pidamos que nos ayude la intercesión de San Benito a encontrar la voluntad de Dios y llevarla a cabo.


Día tercero

En la soledad de Subiaco las tentaciones surgen con gran fuerza; será la oración y la penitencia quienes ayuden a someterlas, aunque un día, es tal la fuerza, que se tiene que arrojar en un zarzal para no caer en ella.

Debemos cuidar la oración y hacer pequeñas mortificcaiones, para poder resistir la tentación.

Pidamos que la intercesión de San Bneito nos ayude a orar y hacer penitencia para poder vivir siempre unidos al Señor.


Día cuarto

San Benito encuentra, para si y sus monjes, en vida de oración y del trabajo bien hecho, las bases para vivir su entrega a Dios por eso el lema benedictino será “Ora et labora”, reza y trabaja.

Debemos procurar vivir la unidad de vida y no establecer una división, separcaión, entre la vida de fe (oración) y la vida laboral-profesional (trabajo).

Pidamos que la intercesión de San Benito nos ayude a saber glorificar a Dios con nuestro trabajo, porque lo comenzamos y acabamos en su nombre.


Día quinto

San Benito tuvo que trasladarse a Montecasino a causa de la envidia de algunos, que llegan, no solo a tergiversar sus aciones sino que incluso atentan contra su vida.

Debemos tener siempre en cuenta que el cristiano por su fidelidad a Cristo tiene a veces que sufrir; pero la fidelidad y la verdad siempre al final triunfarán.

Pidamos que la intercesión de San Benito nos de la fortaleza necesaria para ser fieles a la verdad y saber llevar las incompresiones de los intransigentes.


Día sexto

Benito, al llegar a Montecasino, tiene que emprender la tarea de evangelizar a los moradores del lugar, que habían desvirtuado su fe cristiana ofreciendo sacrificios a los ídolos.

Debemos de hacer lo posible para que los ídolos de nuestro tiempo: el afán de tener, de gozar sin medida, de ser superiores a los demás…, no nos hagan exclavos sino libres para amar a Cristo y a los hermanos.

Pidamos por la intercesión de San Benito que nos veamos libres de esta atracción que nos aleja del verdadero camino de la Salvación.




Día septimo

San Benito tiene una gran estima a la oración en común, sobre todo al Oficio Divino, recitación oficial de la Iglesia al ritmo de las horas. Una oración basada, en la recitación y meditación de la Sagrada Escritura, especialmente el Libro de los Salmos.

Debemos tener en gran aprecio la oración comunitaria y así mismo el leer, escuchar y meditar la Palabra de Dios escrita; el cristiano debe crecer cada día en el conocimiento y meditación  del mensaje divino de liberación para el hombre.

Pidamos, por intercesión de San Benito, que sepamos venerar las Sagradas Escrituras como la voz de Dios que se nos comunica a nosotros, y saber encontar en ellas la fuerza de Dios y la fuente de la verdadera vida.


Día octavo

San Benito quiso que sus monjes viviesen en la soledad y el silencio, pero por el contrario que su labor fuera solidaria con el resto de los hombres; de aquí que los monjes benedictinos enseñaron las técnicas de la agricultura y otras artes a los pueblos bárbaros, así como promovieron el saber, siendo para nosotros los transmisores de la cultura antigua.

Debemos, como cristianos, ser solidarios con todas las personas; y comunicar los talentos que el Señor nos ha dado, para contribuir solidariamente al progreso de todas la personas.

Pidamos, por intercesión del Santo Abad, ser portadores de las virtudes cristianas y ayudar a hacer que en el mundo reine la justicia y la paz, que sólo Cristo puede dar.  


Día noveno

San Benito llega al final de sus días lleno de amor de Dios. A lo largo de su vida ha sido valiente, intrépido, firme, taumaturgo, místico, organizador, austero, tierno, emprendedor... Y ha conseguido gran fama de obrador de prodígios a favor de los desvalidos.

Debemos esforzarnos para que, cuando el Señor nos llame, nuestra vida esté llena no sólo de buenas intenciones sino de realidades vividas de amor, por amor y con amor de Dios.

Pidamos, por intercesión de San Benito, que nos esforcemos cada día  para conseguir la vivencia y los frutos de la virtudes cristianas; especialmente de la fe, esperanza y caridad, para encontrarnos así, un día, participando de la gloria del cielo con San Benito Abad. Amén.  

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